El P. Modesto García Madariaga SJ falleció la mañana del 14 de agosto, a los 84 años de edad, 64 años en la Compañía y 53 de su ordenación sacerdotal. 

Nació el 11 de abril de 1940 en Madrid, España. Era el séptimo de ocho hermanos. En setiembre de 1959, con 19 años de edad, ingresó al Noviciado en Madrid, España. Hizo sus estudios de humanidades en Lima durante los años 1961 a 1964.

Estudió Filosofía en Alcalá de Henares, España de 1964 a 1966. La etapa de Magisterio la realizó en Huachipa y Piura durante los años 1966 a 1968. Continuó con los estudios de teología en la Universidad de Comillas en Madrid, de 1968 a 1972. Culminó su formación con la Tercera Probación en Arequipa en 1976. Ese mismo año, el 3 de octubre, emitió sus Últimos Votos en la misma ciudad.

La vida apostólica de Modesto comenzó en 1973 y estuvo prácticamente centrada en Arequipa, a excepción de algunos periodos cortos (1982 y 1989) en los que estuvo destinado en el Colegio San Ignacio de Loyola en Piura y en el Seminario Diocesano San Luis Gonzaga de Jaén como profesor.

En su primera etapa en Arequipa, de 1973 a 1981, fue destinado al Colegio San José como director espiritual y profesor de religión. La segunda etapa en Arequipa comenzó en 1999. Desde entonces y hasta el año 2020 colaboró en las diversas obras como asesor espiritual en el Colegio San José, en el Templo de la Compañía, capellán en el Hogar de Cristo y asesor de las Comunidades de Vida Cristiana- CVX.

Desde el 2021 residía en la Enfermería Provincial en Lima, donde vivió sus últimos años cuidando su salud y orando por la Compañía.

Sus restos fueron velados en la comunidad jesuita Nuestra Señora de Fátima y su Misa de Funeral se celebró el jueves 15 de agosto, en el salón parroquial de la Parroquia Nuestra Señora de Fátima (Miraflores). La homilía estuvo a cargo del P. Juan Carlos Gutierrez SJ, quien recordó al P. Modesto como alguien que supo ponerse al servicio de los que más lo necesitaban.

«La catequesis de la primera comunión, el rezo del Rosario y la Misa de los niños han sido los apostolados por los que Modesto ha podido expresar mucho de lo que él siente, como parte de su misión como sacerdote. Ha sabido darse, siendo él, sin mucha reserva. Ha sabido ganarse el cariño de las personas y ese cariño es el que le ha sostenido hasta estos últimos días», agregó.