El miércoles 11 de abril, el P. General Arturo Sosa SJ visitó Venecia para participar en la inauguración de la restaurada Cappella dei Tessitori di seta (Capilla de tejedores de seda) en la Iglesia de la Asunción. La restauración de la capilla se completó con la ayuda de la Fundación Suiza Pro-Venecia. El P. Sosa estuvo acompañado por el Padre Joachin Barrero SJ, Asistente Regional para el Sur de Europa, y el P. Gianfranco Matarazzo SJ, Provincial de la Provincia Euromediterránea de la Compañía de Jesús. Las autoridades cívicas de la ciudad de Venecia también participaron en la ceremonia.

Aunque la Compañía ya no tiene una comunidad en Venecia, el Padre General señaló que la ciudad «sigue siendo una gran luz para los jesuitas y su historia, que se iluminó cuando los primeros diez compañeros, la mayoría de los cuales habían completado sus estudios en la Sorbona de París, se runión allí en 1537 con la intención de embarcarse hacia Tierra Santa y comenzar una vida apostólica completa».

La estancia veneciana de los primeros compañeros fue un momento de discernimiento, de búsqueda de la voluntad del Señor, para poder tomar una decisión sobre su futuro. Incluso hoy, el período veneciano sigue siendo para los jesuitas una herencia de la historia vivida, una memoria esencial. La Congregación General 36 recordó la importancia del período veneciano de la Compañía al decir de los primeros compañeros, «al discernir una nueva dirección para sus vidas, se aferraron a lo que ya habían encontrado como vivificante: compartir sus vidas juntos como amigos en el Señor, viviendo muy cerca de las vidas de los pobres y predicando el Evangelio con alegría «. (CG 36, D.1 n4).

(Con información de Curia General en Roma)