El 27 de abril, fiesta de San Pedro Canisio SJ, nació la nueva Provincia de Europa Central (ECE) a partir de la fusión de cuatro Provincias muy diferentes entre sí: Alemania, Austria, Lituania-Letonia y Suiza, territorios donde el santo jesuita realizó gran parte de su labor apostólica .
La creación de esta nueva entidad administrativa es ante todo fruto de un proceso de discernimiento reflexivo; han transcurrido cuatro años durante los cuales ha habido diferencias de opinión, pero también se han ido descubriendo nuevas y apasionantes posibilidades.
“Estoy contento porque todo el proceso de discernimiento ha demostrado que la fundación de la Provincia de Europa Central (ECE) no ha sido cuestión de pura organización. Es más bien una respuesta activa a los cambios y desafíos de nuestro tiempo“ expresó el P. General Arturo Sosa SJ en el video mensaje que ha enviado a los jesuitas, colaboradores y amigos, de esta región.
Según el P. Sosa, los jesuitas y laicos implicados en el proceso han sido capaces de imaginar unas estructuras que proporcionan gran flexibilidad a la misión. Esta misión habrá de ser contrastada constantemente con la respuesta que exigen los “signos de los tiempos”. El Padre General subraya que la nueva Provincia vive una dimensión que ya caracterizó los primeros pasos de la Compañía de Jesús en tiempos de Ignacio. De hecho, los “Primeros Compañeros” eran un grupo de hombres de diferentes países que hablaban distintas lenguas. La Compañía, ha sido intercultural desde sus mismos orígenes.
Esta confluencia de personas de diferentes culturas responde a lo que necesitan tanto Europa, como el mundo y la Iglesia. Promueve la búsqueda de vías de reconciliación en los conflictos, es camino hacia una unidad sin uniformidad en un contexto en el que las diferencias pueden significar una riqueza y en el que el bien común prevalece sobre el individualismo o el sectarismo.
Añade el Padre General: “Es vital atender con cuidado a las diferencias culturales de sus Provincias de origen, para poder así trabajar por la misión en un contexto real y mantener el contacto adecuado con las personas a nivel local”. Es el modo de lograr la escucha constante del otro y la búsqueda de aquellas sinergias en la misión que el hecho de estar juntos hace posibles.
La creación de la nueva Provincia ECE trata de responder muy concretamente a la pregunta: ¿dónde y cómo pueden los jesuitas y sus colaboradores, estar presentes, ser relevantes y más eficaces en el momento actual? Se ha visto que los tres sectores más importantes son la espiritualidad, la educación y el campo “socio-ecológico”. Esto ha llevado a establecer órganos de gobierno basados en ámbitos apostólicos y no en territorios regionales o nacionales. En el mapa de la nueva Provincia no se da visibilidad a las fronteras políticas de los países, sino que adquieren relieve las ciudades con presencia de la Compañía. En definitiva, no son cuatro Provincias las que se unen, sino 36 comunidades las que se vinculan.
Para reforzar el sentido de unidad, se ha preparado un pequeño manual para la oración comunitaria y la que se hace antes de las comidas, en todas las lenguas de la Provincia: alemán, francés, inglés, latín, letón, lituano y sueco. El “modo de proceder” de la nueva ECE deberá seguir incorporando a sus reuniones de planificación los elementos de la espiritualidad ignaciana que se vienen practicando y que marcan nuestro espíritu: silencio, discernimiento, conversación espiritual y solidaridad en la toma de decisiones comunitarias.
(Con información de Jesuits Global)