En el marco de la celebración de la fundación de la comunidad jesuita y la Fiesta Patronal de la Virgen de Fátima de Santa María de Nieva (Condorcanqui, Amazonas), la Municipalidad Provincial de Condorcanqui otorgó un reconocimiento al Hno. Silvestre Fernández García SJ por su labor educativa y pastoral en esta zona.
En 1968 el hermano llegó por primera vez a esta región y asumió la dirección de la Escuela e Internado de Nieva, que atendía a la población Awajún y Wampis, hasta 1978. Posteriormente regresó en el año 2007 para apoyar las labores de la Parroquia y la Biblioteca.
Actualmente, el Hno. Silvestre sigue acompañando la misión en esta zona del país. Colabora en la Parroquia, en el Centro Cultural Nieva y en la Biblioteca Pancho Kapantu.
Compartimos una pequeña biografía escrita por el mismo Hno. Silvestre.
Memorias de un hermano misionero
Yo, Silvestre Fernández García S.J. nací en Medinaceli, Soria, Castilla la Vieja, el día 31 de diciembre de 1932, siendo mis Padres: Ambrosio Fernández Sigüenza y Sotera García Muñoz.
Llegada la edad de 12 años por decisión de mis padres, me enviaron al Seminario de Sigüenza provincia de Guadalajara, por el año 1944, era tiempo de la guerra europea, donde en el Seminario había una gran escasez de medios materiales, especialmente en las comidas.
En el Seminario había buen ambiente de piedad y estudio. Pasado los 5 años de latín, hice 3 años de Filosofía que fueron los más duros en mi carrera, los textos eran en latín y las clases había que darlas en latín, tenía pánico a los exámenes, me esforcé mucho en estudiar y me aprobaron porque veían mi esfuerzo y vocación, aprobaba con las justas y un curso de filosofía me desaprobaron y tuve que subsanar al año siguiente que aprobé.
Después de 10 años de vida religiosa en el Seminario ingresé a la Compañía de Jesús en 1956, y a primeros de agosto de 1957, partimos rumbo al Perú 3 sacerdotes jóvenes, 3 novicios escolares y un hermano. Embarcamos en un buque carguero italiano Antoniuti Usodimari navegando durante 25 días por el Atlántico, el barco lleno de inmigrantes, con enfermos y hasta un muerto. Arribamos al puerto del Callao el 30 de agosto de 1957, fiesta de Santa Rosa de Lima.
Hice los votos del Bienio el día 15 de marzo de 1958 en la Capilla del Noviciado en Miraflores.
En el año 1959 me destinaron a Arequipa.
En el año 1960 me destinaron a Roma. Trabajé casi 3 años con el P. Asistente de la Eslávica.
En el año 1963 me destinaron a Cusco.
En 1966 fui destinado a Cochabamba-Bolivia para hacer la Tercera Probación.
El mismo año me destinaron a Lima a la Parroquia de San Pedro.
Hice los últimos votos el 15 de agosto de 1966
En 1967 trabajé en el Colegio de la Parroquia Nuestra Señora de los Desamparados.
En enero de 1968 llegué al Vicariato de Jaén. Pronto viajé a Chiriaco para embarcarme para Santa María de Nieva siempre con la ilusión de llegar a mi puesto de Misiones.
Fue el P. Gonzalo Puerta quien pidió un hermano al P. Provincial y el que me introdujo en el trabajo. Acepté el reto con gran ilusión: director de la Escuela de 150 alumnos y encargado del internado de 100 alumnos Aguarunas.
El trabajo diario de un colegio internado, es bastante lleno y comprometido, fui realizando mi vocación Misionera en el trato con los nativos, clases de Religión y de castellano, la piedad personal se fue fundamentando.
Construyó el local de la Escuela de primaria. Construyó la loza deportiva de la escuela con vista al Marañón. Construyó la granja de gallinas y patos. Construyó la carpintería. Introdujo la incubadora de pollos. Realizó numerosos viajes de compra y traslado de alimentos para el internado. Implementó la chacra de donde se suministraba de plátanos para al internado.
En 1978 el Señor Obispo Hornedo me llamó a Jaén para la Administración de la Prefectura Apostólica de Jaén.
En 1989 llegué a San Ignacio con la esperanza de seguir con mi espíritu Misionero, la estadía en San Ignacio fue el comienzo de mi vocación de catequista.
En 1991 el P. Provincial me propuso destinarme a Ayacucho y viajé inmediatamente a la ciudad de Huamanga.
En el año 2001 habiendo dejado organizada y con personal abundante la Oficina Departamental de Educación Católica de Ayacucho y vista la oportunidad de dejar a otros Profesores más jóvenes, me destinaron a Cangallo donde se fundó la nueva casa y Parroquia San Pedro de Cangallo.
El 22 de junio del 2007 llegué a Santa María de Nieva. Los trabajos y actividades de Santa María de Nieva los pondré en resumen ya que esta última etapa de mi vida no se ha concluido.