El domingo 22 de abril, en la Iglesia San Pedro de Lima, se llevó a cabo la Misa central por los 450 años de la llegada de los jesuitas al Perú, que fue presidida por Mons. Nicola Girasoli, Nuncio Apostólico del Papa Francisco en el país, ante centenares de fieles que se congregaron en el Templo para participar de la celebración.
La ceremonia contó con la presencia del Cardenal Juan Luis Cipriani, Arzobispo de Lima. Concelebraron la Eucaristía Mons. Miguel Cabrejos, Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana; el P. Provincial Juan Carlos Morante SJ; Mons. Luis Bambarén SJ; Mons. Pedro Barreto SJ, Arzobispo de Huancayo; los obispos de las diócesis de Chimbote, Callao, Puno y Huacho; Superiores Provinciales de la Orden de los Camilos, Franciscanos (OFM), Mercedarios, Misioneros Combonianos, la Familia Pro Ecclessia Sancta; y la gran mayoría de jesuitas que residen en Lima.
Acompañó el Coro y Orquesta Lima Triumphante, dirigido por el maestro José Quezada Macchiavello, con un repertorio de música litúrgica de tiempos del Virreinato que incluyó la Misa de San Ignacio del jesuita Domenico Zippoli (1688 – 1726), compuesta para ser interpretada en las Reducciones indígenas del Paraguay y que por primera vez fue presentada en el Perú.
Durante su homilía, Mons. Nicola Girasoli exhortó a jesuitas, religiosos y laicos presentes a construir una “Iglesia de puertas bien abiertas”, en sintonía con el mensaje del Papa Francisco. Asimismo, leyó una carta enviada por el Secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Pietro Parolin, a través de la cual el Santo Padre hizo llegar su saludo a los jesuitas del Perú por su aniversario, animándolos a que “asistidos por la luz del Espíritu Santo y en fidelidad al carisma fundacional, continúen con júbilo y renovada energía su servicio a la misión de Cristo, anunciando el Evangelio, sosteniendo la fe y promoviendo la realización de la justicia”.
Posteriormente, Mons. Miguel Cabrejos dirigió un discurso en el que reconoció la importancia del apostolado educativo, social e intelectual de la Compañía en el país. “Sabemos que hoy hay muchas encrucijadas, muchas periferias, muchos retos. Les pedimos, hermanos y amigos jesuitas, que sigan animando a toda la Iglesia a caminar por las rutas del discernimiento para buscar y hallar la voluntad de Dios, para la defensa de la dignidad de todo ser humano y para el cuidado de la Casa Común”, expresó.
Luego el P. Provincial Juan Carlos Morante pronunció unas palabras de agradecimiento a todos los presentes. “Gracias por ayudarnos a compartir esfuerzos, fatigas y sueños en favor de nuestros hermanos, sobre todo los más pobres y excluidos. Gracias por su amistad y generosidad, que nos ayuda a sentirnos hijos e hijas del mismo padre”.
Finalizada la ceremonia, el público asistente pasó al Claustro para compartir con los jesuitas y autoridades religiosas presentes un agasajo y diferentes presentaciones artísticas con motivo del aniversario.