El sábado 21 de marzo se cumplieron 40 años del martirio de Lluís Espinal SJ, jesuita de origen catalán asesinado por paramilitares en Bolivia debido a su fidelidad al Evangelio y a su compromiso con la justicia y con los marginados.
Espinal siempre actuó de una manera apartidista, pero no neutral, ya que estuvo al lado de los pobres y de los desvalidos y por eso, proféticamente, supo denunciar la injusticia y la opresión que los poderosos ejercían sobre el pueblo sencillo boliviano. Por eso el jesuita denunció con valentía en Bolivia los despropósitos, las injusticias y las violaciones de los Derechos Humanos perpetrados por los dirigentes políticos de aquel país.
En su oración “Gastar la vida”, Espinal decía: “Nos da miedo gastar la vida, entregarla sin reservas. Pero Tú nos la das para que la gastemos y no nos la podemos reservar en un egoísmo estéril. Somos antorchas que únicamente tenemos sentido cuando nos quemamos; únicamente entonces somos luz”. Espinal oraba a Dios así: “Libéranos de la prudencia cobarde, que nos hace ahorrar el sacrificio y que busca la seguridad”. Nacionalizado boliviano, afirmaba que “Morir por un pueblo puede dar más carta de ciudadanía que nacer en él”.
Por su compromiso con la justicia, fue secuestrado, torturado y asesinado por los paramilitares, la noche del 21 de marzo de 1980. Cuando el P. Lluís Espinal salía del cine, fue obligado a entrar en un jeep y trasladado al matadero del barrio de Achachicala. Al día siguiente su cuerpo fue encontrado en un vertedero, camino de Chacaltava. Pero como el grano de trigo, que solo cuando muere da fruto, el testimonio evangélico de Lluís Espinal no ha sido infecundo. Por eso en su viaje a Bolivia, en julio de 2015, el Papa Francisco quiso rezar en el lugar donde fue encontrado el cuerpo torturado de Espinal, diciendo de “Lucho”: “Espinal predicó el Evangelio y este Evangelio molestó, por eso lo eliminaron”.
Reedición de»Oraciones a quemarropa»
En conmemoración de los 40 años de su martirio, la Escola Ignasiana d’Espiritualitat (EIDES) presenta una reedición del cuaderno “Oraciones a quemarropa”, conjunto de oraciones de Espinal recopiladas por varios compañeros suyos tras su asesinato y que en su origen estaban pensadas para ser leídas por la radio. Son oraciones con temas humanos y existenciales: el silencio de Dios, la soledad, el dolor humano, la muerte, el enigma del futuro, una Iglesia del silencio, callada ante la injusticia, etc. Oraciones que nos acercan al pensamiento y a la figura de Luis Espinal para que sean conocidos y sigan inspirando en el futuro.