La mañana del 6 de agosto de 1945, el P. Pedro Arrupe SJ se encontraba en el noviciado de Nagatsuka, junto con otros 35 jóvenes novicios y varios jesuitas. La casa del Noviciado se ubicaba a unos seis kilómetros de lo que sería el centro de la explosión atómica. Los jesuitas, al constatar el grado de destrucción y muerte que en segundos esparció aquella sola bomba, improvisaron un hospital en la casa del Noviciado.

Al conmemorarse el 75° aniversario del lanzamiento de la bomba atómica sobre Hiroshima, compartimos el testimonio del propio Padre Arrupe con este video:

Fuente: Centro Arrupe Valencia

Ver también: 

Crónica de Gabriel García Márquez en base a testimonio del Padre Arrupe