El sábado 21 de agosto se realizó la primera fecha del Ciclo de Conversatorios “Autobiografía un diálogo ignaciano”. Este encuentro titulado “Ignacio, el aspirante a héroe” tuvo como invitados a los PP. Deyvi Astudillo SJ y Carlos Rodríguez SJ, y fue conducido por los PP. José Luis Gordillo SJ y Adolfo Domínguez SJ.
Organizado por el Centro de Espiritualidad Ignaciana (CEI), en el marco del Año Ignaciano, el Ciclo pretende ser un “espacio de encuentro virtual que a la luz de la Autobiografía y de la vida de Ignacio nos puede ayudar a preguntarnos y discernir nuestra propia experiencia espiritual”, indicó el P. José Luis Gordillo, director del CEI, al inicio de este primer conversatorio.
Por su parte el P. Adolfo Domínguez, historiador y miembro de la comunidad jesuita Beato Rupert Mayer (Huamanga, Ayacucho), presentó el contexto histórico del episodio en la vida de Iñigo donde le toca enfrentar sus deseos de héroe alimentados por los libros de caballería.
Para el P. Carlos Rodríguez Arana, Superior de los jesuitas en Tacna y Arequipa y ex Superior Provincial de la Compañía, analizar la época en la que creció Ignacio es importante pues desde niño influyó en su deseo de ser un gran héroe.
Cuando recibe la bala de cañón que le produce la herida y lo deja convaleciente, ve trastocados sus proyectos, pero sigue soñando. “Ignacio sueña con el mundo y luego sueña con las hazañas de los santos, pero la herida no le quita el deseo de las grandes cosas”.
Su espíritu heroico lo lleva a confiar en que va a curarse y seguirá haciendo grandes cosas ya sea como caballero, como escribano o como contador, porque “él era un hombre muy hábil para las cosas del mundo y lo demostró luego en la Compañía, porque la organización de la Compañía hasta ahora es un modelo”.
El P. Deyvi Astudillo SJ, delegado de Vocaciones y formación, resaltó la manera en que “Ignacio, por un lado, supo mantener este ideal caballeresco o heroico hasta el día de su muerte y, por otro lado, cayó en la cuenta de que esto por sí solo no era suficiente para la vida fiel a Dios”.
Ignacio comienza su itinerario de conversión a partir de la herida de Pamplona, pero es necesario entender que la herida en sí misma no solo representaba un episodio de dolor si no la caída de un futuro que él se había construido. “La bala de cañón es algo que lo desestructura por fuera y por dentro, y él va a hacer de esa herida un punto de partida para convertirse en un hombre espiritual”.
Recordemos que la Autobiografía es un texto del siglo XVI que presenta la memoria de Ignacio de su propio proceso espiritual. No se trata de un texto escrito por el mismo Ignacio, sino de un relato narrado por él a un colaborador cercano, el P. Luis Gonçalves da Câmara SJ, a insistencia de los primeros jesuitas. Sin embargo, no cabe duda de valor histórico y calidad espiritual como fuente de inspiración para quienes deseen descubrir y vivir su vocación cristiana desde la espiritualidad ignaciana.
Los invitamos a participar del segundo conversatorio que se realizará el 25 de setiembre, a las 7 pm, a través del canal de YouTube de la Provincia “Jesuitas del Perú”.
Grabación completa del primer conversatorio: