Del 17 al 19 de agosto, el P. Provincial Víctor Hugo Miranda SJ realizó su visita al Colegio de la Inmaculada (CI) y al Programa de Educación Básica Laboral (PEBAL) “La Inmaculada”, obra social jesuita que atiende a población vulnerable de la zona de Pamplona Alta en San Juan de Miraflores.
Durante estos días pudo compartir momentos con la comunidad jesuita que reside en el colegio y reunirse también con los integrantes de su Consejo Directivo. Así mismo, su visita coincidió con la Semana Jesuita 2022, siendo testigo de las diversas actividades y proyectos desarrollados por los alumnos, y presidiendo la Eucaristía final.
Además compartió un encuentro con los estudiantes de quinto de secundaria (Promoción Mateo Ricci), con quienes dialogó sobre la responsabilidad que implica ser un alumno jesuita, invitándolos a buscar y encontrar a Dios en el prójimo, en lo humano, y a vivir plenamente el lema «Ver nuevas todas las cosas en Cristo».
Su agenda también incluyó reuniones con padres de familia y con el nuevo Consejo Directivo de ASIA Inmaculada.
Durante su visita al PEBAL La Inmaculada, el P. Víctor Hugo fue acompañado por el P. Santos Rugel SJ, presidente de la Asamblea del PEBAL, siendo recibidos por su directora, Tania de la Torre, quien dio a conocer el estado situacional y los proyectos sociales de esta obra.
Luego, el Padre Provincial compartió con los docentes del Centro de Educación Técnico-Productiva (CETPRO) y del Centro de Educación Básica Alternativa (CEBA) del PEBAL, animándolos a seguir adelante con su labor en un contexto particularmente difícil para muchos, sobre todo, dada la responsabilidad que ellos asumen en el proceso pedagógico e incluso personal con sus alumnos.
Cabe mencionar que esta obra social jesuita nació en 1978 al cumplirse el centenario de la fundación del Colegio La Inmaculada, como expresión del espíritu ignaciano, buscando ofrecer una educación primaria digna a los pobladores de Villa San Luis, en Pamplona Alta.
Con los años su trabajo se amplió al campo de la educación técnica – productiva, la atención de las necesidades de salud y alimentación de la población, y la ejecución de proyectos de desarrollo social, asesorando también a las organizaciones comunales y sociales de base. Jesuitas, profesores, padres de familia y alumnos del CI han participado activamente de esta obra desde su creación.