El cortometraje de animación “Arrupe en Japón” es una colaboración entre la Conferencia Jesuita de Asia Pacífico, el Departamento de “Digital Arts and Computer Animation” de Ateneo de Naga University (Filipinas) y la Elisabeth University of Music de Hiroshima (Japon). Se trata de una mirada a los primeros años del P. Pedro Arrupe SJ, cuando servía en el Japón anterior a la Segunda Guerra Mundial y antes de convertirse en el Superior General de los Jesuitas. 

En 1945, cuando era maestro de novicios en Nagatsuka, a sólo seis kilómetros de Hiroshima, vivió la explosión de la bomba atómica lanzada por un avión de guerra americano sobre la ciudad. Con sus conocimientos médicos, el P. Arrupe ayudó a las víctimas que acudían a su casa. Un joven cuyas heridas fueron tratadas por el P. Arrupe sobreviviría a ellas y más tarde se haría sacerdote.

Hoy, 78 años después del bombardeo de Hiroshima, la luz del P. Arrupe sigue brillando. Sus palabras sobre ser hombres y mujeres para los demás siguen resonando cinco décadas después de que las compartiera en Valencia, España, cuando se dirigió a una asamblea de antiguos alumnos de la Compañía. El propio P. Arrupe fue sin duda un hombre para los demás, no sólo en Japón, donde estuvo al lado del pueblo japonés en uno de los momentos más difíciles de la historia, sino a lo largo de toda su vida.

El 5 de febrero de 2019 se abrió la causa de beatificación y canonización del P. Pedro Arrupe.

También lee la entrevista con Ria Limjap, autora del cortometraje y Consultora de Comunicación de la Conferencia Jesuita de Asia Pacífico (JCAP) [en inglés].

(Con información de Jesuits Global