En medio de una fiesta religiosa, se desarrolló la misa de ordenación del nuevo obispo del Vicariato Apostólico “San Francisco Javier”, Mons. Alfredo Vizcarra Mori S.J, acompañado de familiares, amigos, sacerdotes, religiosos, religiosas, fieles en general y obispos. La celebración comenzó alrededor de las 6:30 pm y se prolongó hasta las 8: 30 pm, en el Colegio San Luis Gonzaga de Jaén.

Mons. Pedro Barreto Jimeno S.J, Arzobispo Metropolitano de Huancayo, presidió la celebración, Mons. Henry Coudray S.J, Obispo Vicario Apostólico de Mongo (Chad – África), y Mons. Santiago M. García de la Rasilla Domínguez S.J, Obispo saliente del Vicariato, concelebraron; acompañaron también Mons. Salvador José Miguel Piñeiro García-Calderón, Arzobispo de Ayacucho y Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP); Mons. Ángel Francisco Simón Piorno, Obispo de Chimbote; Mons. Luis Bambarén Gastelumendi S.J, Obispo Emérito de Chimbote; Mons: Gerardo Cerdín, Obispo Vicario Apostólico de San Ramón.

Estuvieron también, Mons. Emiliano A. Cisneros Martínez, Obispo de la Diócesis de Chachapoyas; Mons. Jesús Moliné Labarta, Obispo de la Diócesis de Chiclayo; Mons. Rafael Escudero López-Brea, Obispo de la Prelatura de Moyobamba; Mons. Antonio Santarsiero Rosa, Obispo de Huacho; Mons. Daniel Turley, Obispo de la Diócesis de Chulucanas; Mons. Héctor Miguel Cabrejos, Arzobispo de Trujillo y Mons. Fortunato Pablo Urcey, Obispo de la Prelatura de Chota.

«Dios es tu fortaleza»

Durante su mensaje, Mons. Pedro Barreto, le dijo al recién ordenado Mons. Alfredo, “hermano en el episcopado yo te digo, vas a sufrir y mucho, como Jesús; experimentarás tu fragilidad y al mismo tiempo la fortaleza de la gracia de Dios contigo, como María; vivirás permanentemente la Pascua, el paso de Jesús en tu vida, con su pasión, muerte y resurrección. Experimentarás una profunda soledad evangélica, pero siempre tendrás el consuelo de la presencia cercana y constante y amorosa de Jesús”.

“Mantén viva la esperanza, una esperanza que no defrauda, recuerda que eres el Pastor que da la vida por sus ovejas como Jesús, que las cuida, las acompaña, las conoce y las ama; por la gracia de Dios que recibirás, serás el Pastor solícito, alegre en el servicio, decidido y prudente en las decisiones que debes asumir. Libre para expresar y vivir lo que te inspire el Espíritu Santo; puedo asegurarte que no estarás sólo, Dios es tu fortaleza, confía en Él que te ha escogido no por tus méritos y cualidades personales, que las tienes, sino por pura gracia de Dios; pero también tus hermanos y compañeros obispos, te acogemos con cariño y esperanza, un buen número hemos venido para decirte que no caminarás sólo. Encontrarás el decidido apoyo de tus principales colaboradores los sacerdotes diocesanos y tus hermanos jesuitas, sin duda estarás apoyado por la valiosa participación de comunidades religiosas y calicós, de las provincias de Jaén, San Ignacio, Condorcanqui y los distritos de Imaza y Aramango” expresó.

Siguiendo los ritos católicos, Mons. Pedro Barreto, ordenó como obispo de ésta jurisdicción al P. Alfredo Vizcarra, tras imponerle los ornamentos de obispo como el anillo, símbolo de compromiso con la Iglesia, la mitra y el callado o bastón que representa a Jesús, el buen Pastor que guía las ovejas.

Luego de ser ordenado, Mons. Alfredo Vizcarra Mori S.J, presidió la celebración de la eucaristía, y entre las ofrendas recibió un sin número de presentes de las diversas parroquias del Vicariato, entre alimentos y productos propios de cada zona. Un momento muy emotivo, fue cuando un grupo de jóvenes awajún, entre varones y mujeres, del Centro Waymaku lo llevaron al centro del patio entre danzas y cantos nativos, para imponerle el tawas (corona awjaún) que lleva el apu, y un wampash (bolso).

Trabajar por la comunión

Mons. Alfredo, durante su homilía, expresó su alegría profunda porque dijo “no es un acontecimiento personal”, por tanto es un acontecimiento eclesial de comunión; comunión significa presencia de Dios, porque Dios es amor y el amor nos une, nos hace sentir que estamos en un momento de vida plena, porque hay desborde de alegría”.

“Eso que nos hace vibrar hoy, esos decesos que nos brotan hoy, es para que nos orienten, para que nos hagan trabajar a todos por la comunión, tan necesaria para todo ser humano y de manera especial en éste contexto, del Vicariato y del país. Agradeciendo a Dios por éste acontecimiento que estamos celebrando, y agradecerles a ustedes por su alegría, que el señor nos mantenga en la alegría y paz, trabajando todos por la comunión, que es lo que Monseñor Santiago ha estado buscando todo éste tiempo” dijo.

Mons. Alfredo Vizcarra, recorrió todo el ambiente de la loza deportiva del Colegio San Luis Gonzaga, donde tenía lugar la ceremonia, para saludar y bendecir a la sy los presentes, acompañado de Mons. Henry Coudray y Mons. Santiago García de la Rasilla.

Antes de finalizar la celebración, Mons. Henry Coudray S.J, Obispo de Mongo, expresó tener sentimientos encontrados, primero por perder a un colaborador importante como es el P. Alfredo tras 17 años de trabajo, pero a la vez dijo que a partir de éste momento se abre una nueva historia entre el Vicariato de Mongo y el Vicariato San Francisco Javier, ya que tenemos el mismo desafío misionero con una “Iglesia de fronteras, el desafío de la pluriculturalidad”.

Huésped distinguido

Tras la culminación de la misa, el Alcalde de la Municipalidad Provincial de Jaén, Lic. Edwin Llique, acompañado de tres regidoras, hizo entrega de una resolución a Mons. Alfredo Vizcarra, que lo declara huésped distinguido, y entregó a la vez las llaves de la ciudad en nombre de toda la provincia. Luego de la celebración, se hizo la presentación de diversos números artísticos, con lo cual culminó la ceremonia.

Fuente: http://www.vicariatodejaen.org/